Para los habitantes del desierto de Kalahari encontrar agua es muy difícil porque se secan las charcas.
Para ello atan a un babuino, que es un mono, a un árbol y le ponen un cuenco de sal porque les gusta mucho la sal.
Después el babuino se la come y empieza a tener sed y, cuando le sueltan, va corriendo a por el agua.
Y los habitantes de Kalahari le siguen.
Daniel.